Salir o no salir. Escalar o no escalar. Esa es la cuestión de muchas empresas que luego de superar sus etapas de ideación, incubación y aceleración, comienzan a pensar en las posibilidades, retos y conveniencia de salir a otro mercado, fuera de su país de origen. Sin embargo, esas mismas empresas olvidan una realidad fundamental para encarar un proceso de internacionalización: no puedo pretender ganar de visitante, si no he ganado de local aún.
¿A qué equivale esto? a ver cómo muchas startups comienzan a pensar (más por la ilusión de aventura y reconocimiento) en abrir en otro país, con los retos culturales, sociales, legales, tributarios que ésto implica y las diferencias que encontraremos en clientes y la intensidad del ambiente competitivo, sin ser realmente una entidad establecida, reconocida y legítima en su mercado local.
Pero bien, supongamos que la empresa ya está vendiendo localmente y que está lista para abrirse a mercados extranjeros. Lo que hemos evidenciado desde Impact Hub Medellín es que existe una clara necesidad de programas de internacionalización en nuestro ecosistema. De acuerdo con Procolombia, el 99% de los productos colombianos ingresan al mercado europeo sin aranceles o en condiciones muy ventajosas y el Banco Interamericano de Desarrollo establece que las empresas medianas que exportan pueden incrementar sus ventas hasta un 41% más que las que no lo hacen. No obstante, de acuerdo con la CEPAL, casi el 38% de las pymes exportadoras abandonan el universo exportador cada año en América Latina y el Caribe. ¿Por qué sucede esto?
Durante los últimos 6 meses hemos desarrollado 3 inmersiones internacionales, en el marco de nuestros programas Lafiya Innovators, SoftLanding COxDE y Accelerate2030. A través de ellas, hemos facilitado que 12 empresas del ecosistema nacional, ya establecidas y “ganando de locales”, pudieran conocer de primera mano los ecosistemas de salud, bienestar, impacto y comerciales, de Basilea, Ginebra, Hamburgo y Leipzig. Lo anterior, nos ha permitido evidenciar varias de las causas por las cuáles una empresa no logra comenzar y mantener su proceso de internacionalización. Entre ellas, resaltamos:
- Su estructura organizacional no está lista, tienen procesos muy rígidos y no es ágil para tomar decisiones
- El capital humano de la empresa no tiene el conocimiento necesario para abrir un mercado, no sólamente frente a lo técnico de entregar un producto, sino también en ámbitos como lo cultural, lo social y conductual de un nuevo país.
- La empresa no lograr apalancar financieramente el proceso de internacionalización, no lo planea bien financieramente y no es capaz de cuantificar la TIR del esfuerzo
- Su innovación y los procesos que la posibilitan, no logra adaptarse lo suficientemente rápido a las demandas, necesidades y nuevas preferencias del mercado al que se llega
- La empresa no es capaz de desarrollar un relacionamiento adecuado y relevante, que le permita abrir puertas y reducir sus grados de separación con tomadores de decisiones clave
Lo que está claro es que emprendedores, empresas pequeñas y medianas en Colombia necesitan apoyo para impulsar la apertura de mercados. Las pymes colombianas están buscando medios y oportunidades para diversificar su cartera de ventas, debido a las consecuencias económicas negativas derivadas del Covid-19. No obstante, las instituciones locales pueden fallar en proporcionar una plataforma estable para que las empresas escalen sus modelos de negocio y desarrollar la combinación adecuada de aliados para el proceso de Softlanding suele ser un reto. Los programas tradicionales no son realmente céntricos en las startups: cada startup necesita un enfoque y un apoyo únicos para afrontar sus desafíos específicos y la formación en internacionalización no está adaptada a las necesidades reales de una empresa. Además, es habitual que los programas no brinden experiencias en los mercados extranjeros para que los empresarios puedan probar y validar su product-market fit y generalmente no ofrecen un soporte posterior a la inmersión.
¿Cómo establecer entonces las bases de un proceso de internacionalización sostenible en tu negocio? Acá te compartimos algunas prácticas que pueden facilitar tu incursión en otra geografía, sin perdernos en el intento:
- Define el propósito: ¿para qué quiero ir a otro mercado? La pregunta es tan simple, que se vuelve obvia. Pero no hay nada más estratégico en un negocio que saber por qué estoy haciendo las cosas.
- ¡Estudia! La competencia, los productos de referencia, los casos prácticos de empresas similares a la tuya que lo lograron (y que no), las tendencias, etc.
- Decide el producto o servicio con el que intentarás abrir mercado, con base en el análisis anterior. Priorizar es clave para optimizar el uso de tus recursos.
- Valida, valida y valida. La validación, más que un proceso, es una mentalidad. Reconocer que lo único que importa del producto no es qué tanto nos guste a nosotros si no al mercado, es el primer paso para conectar con el dolor que hay ahí afuera. A medida que valides, ve refinando el producto o servicio a escalar.
- Haz parte de un programa de Softlanding, de acuerdo a tus necesidades. Algunos programas te exigirán el pago de un fee de entrada, pero si tienes claros los pasos anteriores, podrás aprovechar mucho mejor los contenidos y herramientas que provee el programa. Se trata de acortar tu curva de aprendizaje.
- Enfócate en crear relaciones: las mejores empresas no son las que tienen los mejores productos. Son las que tienen los productos adecuados, en el momento indicado y con los contactos que le permitan abrir puertas. La creación de confianza lo es todo en un proceso de escalamiento internacional y necesitas dedicarle tiempo a esos vínculos humanos.
- Asesórate en los puntos ciegos habituales de un negocio: la normativa, la propiedad intelectual, el alistamiento financiero, la ruta legal y jurídica, entre otros. Rodéate bien.
- Realiza un análisis económico de la iniciativa de internacionalización. Define una inversión inicial, proyecta supuestos de ingresos y costos, define un tasa de descuento y obtén el valor presente. Esto también te permitirá sopesar el costo de oportunidad.
- Ve al otro país. Pasa un tiempo allí, participa en eventos, consume productos similares, únete a una comunidad de emprendedores en su ecosistema, siéntate frecuentemente con empresarios locales y demás.
- Identifica rápidamente si vale la pena seguir por ese camino. “Romantizar” las iniciativas de nuestra empresa y perpetuarlas innecesariamente en el tiempo sólo nos creará fricciones y pérdidas económicas. Tan importante es la iniciativa para crear algo nuevo, como el sentido común de entender que es momento de descartarlo.
¿Quisieras conocer cómo podemos apoyar tu proceso de internacionalización? Escríbenos para contarte qué programas comenzarán pronto.
2020 was a year that, like many startups in the country, forced us to think differently and prioritize our energies in order to fulfill our purpose: to help the local and national ecosystem by creating value for the entrepreneur, the innovator, the social influencer, the researcher, the intra-entrepreneur and ultimately, those who carry the weight of the ecosystem on their shoulders.
Startup Genome and the Global Entrepreneurship Network (GEN), two of the world’s leading entrepreneurship organizations, recently launched the Global Entrepreneur Ecosystem Report 2020. This is a research piece on entrepreneurship (with interviews conducted with more than 10,000 entrepreneurs around the world), which classifies and rates the value of entrepreneurship and the ecosystems in which they were born and developed. The report can be accessed here.
In the global ranking, the best-ranked ecosystems are Silicon Valley, New York, London, Beijing, Boston, and Tel Aviv-Jerusalem. Bogotá is included in the «emerging» ecosystems (led by Mumbai, Jakarta and Zurich), along with the other four cities in the region that make up the ranking. Bogotá appears behind Mexico City but ahead of Buenos Aires, Santiago de Chile and Curitiba. Medellín is not mentioned.
The launch of the report comes at a critical time when 4 out of 10 startups worldwide have 3 months or less of liquidity in the wake of the pandemic. This means that these companies will collapse if they do not access additional capital or are unable to change their income and expenses, risking a massive extinction of the entrepreneurial ecosystem that took years to consolidate. According to research by Startup Genome:
- About 72% of startups saw their income fall since the beginning of the crisis
- Average drop in revenue is around 32%
- More than 60% have laid off employees and/or reduced their wages
- About 33% of jobs were cut.
Due to the coronavirus, the flow of capital was stopped or slowed down, while investors stopped investing in new portfolios, prioritising those in which they already have investment.
Today the goal in Latin America is to survive and not scale, and that is where our commitment as Impact Hub Medellin lies. Reality indicates that once we overcome this crisis, the best-ranked ecosystems will continue to be the best performers. Places like Silicon Valley, New York, London, and Beijing will continue to produce great innovations and create high-level value.
Despite this reality and the harmful effects derived from Covid-19, in 2021 Impact Hub Medellin sought to strengthen ties with our community, provoke more and better relationships between local entities and leaders, explore new areas of impact, create new incubation and acceleration programs and in general, re-understand our role and the meaning since arriving in Colombia in 2018.
For example, we identified the need to support companies led by women in the city and the region, to enhance their business ideas and strengthen their impact. Within this opportunity is where the program «Emprender Mujer» was born, a platform for the support and strengthening of women’s businesses. The objective of the program is to work to reduce the economic inequality gap for women in the territories, create benchmarks for business and entrepreneurial development that diversify and expand the labor participation of women and make their leadership visible. The program has allowed 50 women, most from underrepresented communities, to become included in the entrepreneurial ecosystem, usually open only for those who can normally access the opportunities.
We are excited for the plans and progress we´ve made in 2021 so far and the value this has created for the local ecosystem. While we still are a young entity in the city, we are convinced that we can contribute to the achievement of a better ecosystem, more inclusive and designed so that access to opportunities expands.
Sincerely,
Federico Restrepo Sierra
Sebastian Bustamante Gonzalez
Si bien existe un buen número de empresas jóvenes y startups innovadoras que están aportando soluciones a los desafíos que ha traído el Covid-19, la realidad nos muestra que estos emprendimientos y las organizaciones que los apoyan están sufriendo duramente los impactos de la pandemia. Por esto te traemos 20 cosas que nos enseñó la pandemia.
Un estudio reciente del BID y Prodem explora estos impactos y las respuestas de los emprendedores y ecosistemas, con base en una encuesta a 2.232 emprendimientos de América Latina y el Caribe (ALC) y a 429 instituciones de apoyo tales como incubadoras, aceleradoras, company builders, espacios de coworking y agencias públicas de apoyo a la innovación.
Los impactos son mayores entre las empresas de menor trayectoria. 2 de cada 3 empresas con menos de 1 año de vida dejaron de vender, frente a algo menos de la mitad de las que tienen al menos 3 años.
Por el contrario, los emprendimientos del sector tecnológico y las empresas jóvenes que más habían logrado crecer en los años anteriores, estarían sufriendo un poco menos.
El 29% de las tecnológicas dejó de vender, frente a más del 80% en otros sectores de servicio; mientras que apenas un tercio de las empresas más dinámicas dejaron de vender, frente al 53% del promedio general.
La pandemia también está pasando factura en el ánimo general de los emprendedores y sus equipos. Dos de cada tres emprendimientos han visto decaer significativamente el ánimo de su equipo emprendedor, algo que se da de forma aún más acentuada entre sus empleados (71%).
Los 20 aprendizajes de los emprendedores
Quisimos compilar 20 aprendizajes que hemos tenido todos los emprendedores durante esta época de pandemia, que pueden resonar con otras lecciones que tú también has tenido:
- Hay que pensar a largo plazo.
- La relación con mis proveedores importa.
- Ofrecer un valor que se vuelva indispensable para mis clientes.
- Tener nociones financieras.
- Ser capaz de pivotear o replantear mi negocio rápidamente.
- Unirme con la competencia puede ser una buena idea en la crisis.
- Como empresa debo ser solidaria.
- La tenacidad emprendedora es todo en épocas como esta.
- La economía es más frágil de lo que parece.
- Lo que comunique mi marca en esta crisis será como se me perciba después.
- Mantener mi equipo en este momento es el mejor voto de confianza.
- En algún momento tendré que hacer sacrificios difíciles.
- Hay que ahorrar y plantear mi caja para tener al menos 6 meses de supervivencia.
- Debo tener al menos 3 ideas nuevas en incubación y desarrollo.
- Hay sectores que en época de crisis van a crecer.
- Si soy capaz de aguantar, saldré de la crisis más fuerte y renovado.
- La salud será un mercado cada vez más vital para el mundo.
- La crisis le ayudó a entender a muchos que estaban emprendiendo por las razones equivocadas.
- Las cadenas de abastecimiento internacionales pueden reemplazarse por locales.
- Mi empresa no necesita cargar costos fijos como oficina o forzar al staff a desplazarse diariamente al lugar de trabajo.
¿Tienes otros aprendizajes? Acá estamos para leerlos 😉
Gambetiando is an innovation based platform, which aims to improve the health and wellbeing in vulnerable communities in Medellin (Colombia), using soccer as an entrance door for adolescents between 10 and 15 years old. Gambetiando intends to create a set of socio-emotional skills, under a strong partnership framework and a social entrepreneurship oriented program, enhancing a creative use of technology in order to boost and develop knowledge, in an aligned way with the Sustainable Development Goals. We attended the World Urban Forum (WUF), Abu Dhabi 2020. What we learned at WUF10?
The WUF10 helped us understand current global priorities in terms of urban planning and the SDGs, from a multiple and diverse set of global actors, all immersed in complex and substantial realities, with different challenges and conditions. Within this context, Gambetiando seems deeply relevant to the current local, national and global priorities in Colombia, as health, well-being, empowerment and sustainability – Gambetiando’s goals – fall directly into the urgencies of our cities today.
Through WUF10 we raised awareness of the sustainable urbanization amongst our stakeholders and consortium partners and gained an enhanced understanding of our project´s urban practices through an open and inclusive debate, the exchange of best practices and policies, and the acknoledgement of the learned lessons. Being able to link adolescents from their earliest ages with a framework of socio-emotional development and skills, with a direct impact on social entrepreneurship and leadership, Gambetiando fits perfectly with what was perceived at WUF10 as prioritary elements: sustainable urbanization in all of its ramifications, collaboration and cooperation between different stakeholders and groups committed to the advancement and implementation of sustainable urbanization within cities.
Several elements at WUF10 caught our attention. The following is a brief summary:
- The ‘Decade of Action’: The next 10 years will be key to achieving the Sustainable Development Goals. This was recorded in the WUF10 document, in which UN-Habitat called for speeding up work at three levels: global, local and people. At the global level, it is indicated that it is necessary to obtain more resources and allocate them to intelligent solutions. In the local framework, cities were invited to strengthen their public policies to develop sustainable, resilient and safe territories. Finally, from the ‘people’ component, civilians, private individuals and academia are called to work together. Culture, women and data is positioned as the fundamental agents for this key decade for the development of truly human and sustainable cities.
- The Fourth Industrial Revolution is unfolding as a distinctly urban phenomenon, making cities the source, the testing ground, and the beneficiaries of technological innovation and driving the global movement toward Smart Cities.
- 2030 Agenda: cross-cutting theme. The urban agenda for the next 10 years was debated at WUF10. Therefore, events that approached this topic from different perspectives were massively held. For example how to strengthen resilience in cities during this decade, how culture will drive compliance with the Sustainable Development Goals, and how data and monitoring will allow the development of public policies, were amongst the topics discussed throughout the event
- As more cities place culture at the center of urban regeneration and renewal, urban planning and legislation will play an increasingly important role in harnessing culture and innovation in urban space, supporting development, protecting the cultural heritage and integrating different cultures into the DNA of the city. Furthermore, the cultural diversity in cities contributes to their vitality, prosperity, inclusion, competitiveness, attractiveness, positive perception and general development.
Key drivers of success of the 2030 Agenda within cities
For centuries, cities have been centers of innovation and catalysts for progress as they create wealth, enhance development, and tap human and technological resources. The New Urban Agenda is a framework for the implementation of the 2030 Agenda for Sustainable Development and is anchored in social inclusion and the eradication of poverty; guaranteeing sustainable and inclusive urban prosperity and opportunities for all; and promoting environmentally sustainable and resilient urban development.
Diversity, cultural practices and heritage were presented as key points for the development of sustainable cities. According to the WUF10´s final document, if urban heritage is recognized and cities are revitalized, it´s a double win. To that extent, urban renewal, which preserves identity but rethinks environments, is emerging as an essential alternative.
Also, it was remembered that culture drives innovation and the cultural industry ends up being a source of employment and development. Hence the protection of identity and cultural practices in the territories is important. Therefore culture is fundamental because we need to make the diversity of cultures, social and economic groups in the city an asset for wealth. We know that cultural diversity allows progress, but we must do it carefully to avoid falling into intolerance or a dialogue between the deaf. The WUF10 seeked to listen to local and diverse expertise to give a boost in this topic.
One of the key issues in executing the New Urban Agenda and the SDGs in cities is innovation. Although progress is being made in policies, more needs to be done, and this is achieved by creating favorable environments so many more actors are motivated to carry out initiatives that have an impact. This will happen through digital transformation and social perspectives, so that it can be applied in neighborhoods and cities.
Latin America tends to account for the capacity for innovation, good pilot exercises and good examples that the world recognizes. Despite the fact that the event took place so far away, WUF10 had representatives from Colombia, Mexico, Guatemala, Paraguay, Ecuador, Brazil, Barbados.
Women are key to transformation and it was emphasized at WUF10 that women and girls are key agents in the changing their cities. UN-Habitat explained that, given that to as the goal of the next 10 years will be to leave no one behind in the processes of development in innovation, it will be a priority that women are listened to and taken into account when planning cities. In fact, there were spaces specialized in women’s issues and with a gender focus at the Forum. At the end of the event, in the remaining commitments of the Women’s Assembly, the need for ways to measure progress on gender issues and women’s leadership was stated.
Data and knowledge were strengthened as tools for generating public policy and solutions for cities. UN-Habitat recalled that there are already online resources with information such as the City Prosperity Initiative (available at www.urbandata.unhabitat.org) and indicators such as the Culture 2030 Indicators (available on the web www.whc.unesco.org). To strengthen this aspect, UN-Habitat recommended in WUF10 that investments and work be strengthened to develop better urban data platforms and granting acess to civilians.
There was an important and massive participation from the private sector in this WUF10 and interesting relationships could be built with local governments. The private sector, as a result of conversations with other actors, promised to explore financing mechanisms that promote sustainable urbanization and the development of local projects, even in cities that have risky profiles or with low-income populations. Increasingly, this sector is becoming aware of the need for its investments to have a social impact and that the best way to guarantee profitability is to maintain an environment where there is social progress. Private corporations had the opportunity to connect with the public sector and with other actors in meaningful discussions.
Sebastián Bustamante González – Cofounder Impact Hub Medellín
Get to know more of Gambetiando, here.
De ser una moda, el emprendimiento se ha venido consolidando como una opción real de desarrollo económico, afectando o repercutiendo en la generación de empleo, en la innovación o en «dolores» específicos de la sociedad.
Es por esto, que vemos cómo programas enfocados en capturar, fortalecer y consolidar el emprendimiento surgen constantemente en instituciones públicas,
empresas privadas, entidades educativas e incluso, desde aquellos que en algún momento fueron emprendedores y hoy buscan devolverle al ecosistema lo recibido.
Un ejemplo de esto es que en 2017 iNNpulsa Colombia movilizó más de COP $117.000 millones (cerca de USD 42 millones) en recursos para el emprendimiento, la innovación y el desarrollo empresarial.
Otro referente claro de un esfuerzo agresivo para fortalecer un ecosistema de emprendimiento, lo constituye el ampliamente mencionado «Gran Pacto por la Innovación de Medellín», el cual cuenta a la fecha con 2.500 empresas firmantes, liderado por la Corporación Ruta N.
¿Cómo medimos el éxito de las políticas y las inversiones en emprendimiento?
La pregunta que surge entonces, luego de ver cómo todo un ecosistema se vuelca hacia el propósito común de convertir el emprendimiento en una de las principales aristas de una economía, es cómo saber si dichos esfuerzos han sido exitosos realmente.
Quisimos preparar la siguiente guía par dar algunas ideas sobre cómo garantizar que en efecto, todo lo que ponen sobre la mesa por medio de sus programas crea, transforma, convierte, evoluciona y mejora, las comunidades en las que se encuentran sus emprendedores.
¿Qué son los indicadores de éxito en el emprendimiento?
Un indicador es una forma de verificar empíricamente qué pasa con los factores que son clave para el programa; es una medida puntual que captura una dimensión relevante de la realidad de las comunidades en las que el emprendimiento busca surtir efecto.
Por ejemplo, si bien no puedo medir “el empoderamiento de la mujer” como tal, si puedo medir su autosuficiencia económica, las situaciones de violencia intrafamiliar que enfrenta, su estatus socioeconómico, entre otros. Así, a través de indicadores podré conocer su nivel real de empoderamiento.
Un buen indicador es medible, participativo, sencillo, accesible y pertinente, captura cada paso de un proyecto, trazando en números el camino que lo llevó a sus últimas consecuencias. Al tener esto en mente, los indicadores nos pueden aportar la siguiente información:
- Línea base: ¿ De dónde partimos? ¿En qué contexto se desarrolla el proyecto? ¿A qué problema responde? ¿Qué dicen las estadísticas?
- Comportamiento: ¿Qué dirección ha tomado el proyecto? ¿A qué ritmo va avanzando?
- Análisis comparativo: ¿Qué tanto ha avanzado el proyecto? ¿Va el progreso a la par de las metas programadas?
- Desviaciones: ¿Es necesario reestructurar la implementación del proyecto? ¿Qué variables externas han alterado los resultados del mismo?
- Permanencia del impacto: ¿Qué pasó tras la implementación del proyecto? ¿Tuvo efectos a largo plazo?
Por otro lado, debemos establecer claramente el nombre de nuestro indicador, su definición, su método de cálculo, su frecuencia de medición, su unidad de medida y lo que se pretende conocer con el para poder utilizarlo efectivamente.
¿Necesitas ayuda para definir tu escala de medición en tu programa de emprendimiento? ¡Contáctanos!